Se trata de rejuvenecer el rostro reponiendo el volumen donde se ha perdido, tratando las arrugas y estructurando el tejido base.

Para ello se utiliza principalmente ácido hialurónico, sustancia no permanente muy bien tolerada por el organismo, cuya duración media está estimada en unos nueve meses.

Entre sus cualidades, las más destacables, y que le hacen ser un producto de uso habitual en medicina estética, son sus propiedades hidratantes y reestructurantes de efecto instantáneo, dando como resultado una mayor elasticidad y firmeza cutánea. Su aplicación es rápida y sencilla, de modo que la paciente puede realizar una vida normal de inmediato.

El ácido hialurónico es la sustancia empleada para el relleno y perfilado de labios. Esto es motivado porque su resultado garantiza la naturalidad, huyendo de resultados exagerados no deseados. Además, al ser una sustancia totalmente compatible con el organismo, ya que está presente de manera natural en nuestra piel, no hay riesgo de reacciones alérgicas. Una vez infiltrado el resultado es inmediato, ya que el nuevo volumen del labio se aprecia nada más acabar la sesión. Este es un tratamiento de carácter temporal, lo cual es muy ventajoso para aquellas pacientes que quieren comprobar el efecto en su rostro, ya que permanecerá en torno a los seis meses.